DE DESAYUNOS DE TRABAJO COPY & PASTE Y ALGO MÁS

DESAYUNO DE TRABAJO

Un buen caldo de gallina no sólo comporta beneficios para la pronta recuperación de la salud, sobre todo si uno se ha excedido en algo en el espirituoso ejercicio de empinar el codo. Decíamos, un buen “calderón de gallardo” también obra milagros en los ánimos decaídos, en los espíritus más o menos afligidos o desanimados. Claro que también existen otras razones, pero lo cierto es que ayer, en “Marinita”, el conocido restaurante especializado en este potaje -tercera cuadra de Raimondi-, se reunieron Magno Bartra Soto, director regional de Salud de Ucayali, y José María Florián, director del Hospital Regional de Pucallpa. Dada la hora –poco antes de las 9:00 de la mañana-, lo más probable es que el gallináceo desayuno haya sido de trabajo y nada raro sería que el tema del virus A1H1N1 haya sido el pretexto perfecto para la reunión. En todo caso, Bartra, predicando con el ejemplo, a diferencia de su colega, no se sentó a la mesa sin antes lavarse prolijamente las manos. Florián, por su parte, fue el que pagó la cuenta, y, a diferencia de su jefe, nunca se las lavó.

¿ESPÍRITU DE CUERPO?

La vida profesional de la fiscal Carmen de la Cruz Alayo ha estado marcada por altas y bajas. En el 2007, una consulta realizada por el Colegio de Abogados de Ucayali, tendiente a evaluar la conducta funcional de los magistrados del Poder Judicial y del Ministerio Público, le encontró ciertos desmerecimientos, por decirlo de alguna manera. Las conclusiones de dicha consulta arrojaron que de la Cruz Alayo, que en ese entonces se desempeñaba como titular de la Tercera Fiscalía Provincial Penal de Coronel Portillo, era cuestionada por “su falta de celeridad, el incumplimiento de los plazos procesales y el maltrato a los abogados y litigantes”. Como no hay mal que dure 100 años, ni cuerpo que lo resista, resulta que doña Carmen Edith resultó nombrada Fiscal Provincial Adjunta Titular en la Segunda Fiscalía Provincial Mixta de Coronel Portillo, con Resolución rubricada por la Fiscal Suprema Gladys Echaíz Ramos, y a pesar de tener, desde principios de este año, al menos una denuncia en su contra en la Oficina Desconcertada de Control Interno del distrito judicial de Ucayali, las investigaciones caminan con burocrática lentitud.

ALAS Y BUEN VIENTO

El presidente regional de Ucayali, Jorge Velásquez Portocarrero, viajó ayer a los EE.UU. formando parte de una delegación de funcionarios del ministerio de Comercio Exterior y Turismo, encabezados por Mercedes Aráoz. Velásquez. El objetivo del viajecito, que se prolongará hasta el próximo viernes 12, es definir la cooperación que brindará la administración Obama en relación con los compromisos asumidos en temas ambientales y forestales contemplados en el Tratado de Libre Comercio o Acuerdo de Promoción Comercial suscrito entre nuestro país y el del tío Sam. La presencia del presidente regional en la comitiva peruana pondría en evidencia la inmejorable relación existente entre él y el gobierno de Alan García. Si no, habría que recordar las lisonjas y piropos lanzados entre él y el presidente del Consejo de Ministros, Yehude Simon a propósito del problema de los decretos legislativos cuestionados por los nativos amazónicos.

FE DE RATAS

El periodismo de la modalidad “copy and paste” –copiar y pegar- encierra sus riesgos, porque cuando ocurre una patinada, no hay duende de redacción que pueda servir de chivo expiatorio. Andina, la agencia de noticias, por ejemplo, publicó en su portal del martes último
de Luis Valdez Villacorta y Solio Ramírez Garay por el presunto delito de homicidio calificado en contra de Alberto Rivera Fernández. Pues bien, un medio local -que no es Ímpetu, valga la aclaración- reproduce, con foto, título, antetítulo y texto incluidos, la nota de Andina. Pero –siempre hay un pero-, la agencia –y la publicación local- se pegó una resbalada de la gran flauta al mencionar como testigos convocados por el colegiado que preside Jorge Aguinaga Moreno, a Lino Campos García –jefe de imagen institucional de la comuna de Coronel Portillo- y a un tal “Tony Vásquez Reátegui”, cuando en realidad se trata de Tony Reátegui Venancino. ¿Se busca editor? ¡Ups!

Publicado: Columna El Informante, Diario Ímpetu, junio 4, 2009